El concepto “zoonosis” fue definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1956 como cualquier enfermedad que, de manera natural, es transmisible desde los animales vertebrados al hombre.

En 1959, esta definición fue modificada por el comité de expertos de la propia OMS para denominar así a las enfermedades que se transmiten entre los animales y el hombre y las consideró como un problema de salud pública debido a que afectan a una gran parte de la población tanto en zonas urbanas como rurales.

Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud considera que la diseminación de estas enfermedades está impulsada por la modernización de las prácticas agrícolas. Particularmente en las regiones en desarrollo vulnerables a la destrucción del hábitat, la invasión humana y el cambio climático. “El impacto de las zoonosis no solo radica en el daño a la salud pública, sino que ocasiona severas pérdidas económicas en la región”, asegura.

Situación en México

Si bien, en México ha sido exitosa la erradicación de enfermedades exóticas como la fiebre aftosa, enfermedad hemorrágica de los conejos, fiebre porcina clásica, gusano barrenador de ganado, encefalitis equina venezolana o fiebre amarilla, entre otras, aún prevalece un número importante de ellas.

Durante su participación en un foro especializado en zoonosis, celebrado en el Senado de la República, Verónica Gutiérrez Cedillo, del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, estimó que de cada 10 enfermedades infecciosas, 6 son transmitidas por animales. Además detalló que la vigilancia epidemiológica ha captado 147 enfermedades de reporte obligatorio. De estas, 14 son enfermedades zoonóticas como rabia, brucelosis, teniasis, cisticercosis, entre otras.

Por su parte, Pablo Manrique-Saide, investigador de la Universidad Autónoma de Yucatán, en su artículo “Hacia el abordaje integral de las enfermedades transmitidas por vectores en el sur de México”, publicado en abril de 2023 en la revista Salud Pública de México, explica que las enfermedades transmitidas por vectores (ETV) son un problema de salud pública. Las más reconocidas en el sur del país, “por la magnitud y morbilidad de sus brotes”, son las fiebres del dengue chikungunya y Zika y arbovirosis transmitidas en áreas urbanas por el mosquito Aedes aegypti. Además, la malaria, la enfermedad de Chagas, la leishmaniasis y las rickettsiosis son también ETV de origen parasitario y bacteriano de gran importancia.

Las más comunes

Las siguientes son algunas de las zoonosis más frecuentes y comunes en México.

Si bien en México la rabia en perros ha sido casi erradicada, los murciélagos siguen siendo una fuente de preocupación. Estos pueden transmitir la enfermedad a otros animales y, ocasionalmente, a humanos.

El parásito Trypanosoma cruzi causa la enfermedad de Chagas y las chinches la transmiten. Entre 1.2 y 6 millones de personas en México adquieren esta dolencia. Además, las áreas más afectadas son las regiones rurales y pobres, donde las viviendas suelen estar infestadas de chinches.

En su caso, la toxoplasmosis, causada por el parásito Toxoplasma gondii, que se encuentra en las heces de gatos y otros animales infectados, es común. Se estima que alrededor del 30% de la población ha estado expuesta al parásito. En la mayoría de los casos, la infección es asintomática o produce síntomas leves similares a los de la gripe. Pero, puede ser peligrosa para mujeres embarazadas y personas con sistemas inmunológicos debilitados.